El principal motivo de remodelación del lugar fue el adecuar
las instalaciones del IMCYC a las necesidades
de servicio que demandan los miembros de la industria a los que atiende
el Instituto. En ese sentido, es que se construyó un tercer piso
para instalar un nuevo auditorio. La creación de este espacio
resultaba fundamental pues el aula existente con anterioridad tenía
30 años de uso y era obsoleta en muchos aspectos. Hoy, el nuevo
auditorio de usos múltiples cuenta con todo lo necesario para
impartir cursos, seminarios, charlas y videoconferencias. Se cuenta,
por ejemplo, con lo necesario para implementar un sistema de traducción,
así como con una terraza en la cual se puede, desde tomar un
café durante unos minutos de descanso de algún evento,
hasta organizar una comida formal. Cabe señalar que en el aula
pueden estar 50 personas, con sus mesas –si se trata por ejemplo
de una actividad de certificación– o 100 personas, si se
trata de alguna conferencia.
Otro aspecto importante de la remodelación fue la colocación
de un elevador que comunica a todos los pisos –con el fin de apoyar
a las personas con capacidades diferentes– así como de
rampas en la entrada y en el acceso a los sanitarios. La construcción
de un tercer nivel implicó reforzar la cimentación pues
la estructura existente no era suficiente, además de que los
estratos de la zona son lodosos. Se rediseñó la cimentación
que soporta de forma independiente el tercer piso recién construido.
Es decir, la losa del piso del auditorio y de la terraza, es totalmente
independiente de los dos niveles inferiores. Cabe decir que, en sus
orígenes, la sede del IMCYC fue una casa habitación de
un solo nivel. Para la década de los setentas, ya había
sido levantado el segundo piso para albergar el aula.
Por su parte, en la terraza del IMCYC hoy destaca una hermosa velaria
que sirve para crear un espacio “cubierto”, pero al mismo
tiempo libre, abierto, donde las personas que fuman pueden salir si
lo desean.
En su parte exterior el edificio muestra ahora, en el área de
estacionamiento, concreto permeable. Destaca también el hecho
de que se cuenta con un sistema de entrada de empleados a través
de impresión de huella, así como vigilancia monitoreada
en los principales espacios del edificio. En cuanto a la biblioteca,
se recuperó un 40% del espacio al colocar mobiliario plegable,
lo que generó que el inmenso acervo esté en mejores condiciones
al tiempo que se puede seguir nutriendo la colección. Una sala
de consulta confortable y con luz adecuada como la que hoy tiene esta
biblioteca, es idónea para leer una revista o consultar libros
técnicos.
También hubo un cambio en los espacios dedicados a oficinas pues
ahora se cuenta con secciones modulares así como oficinas particulares,
algunas creadas y otras actualizadas. Virtualmente, también se
creció con los trabajos de mejoramiento, aumentándose
el ancho de banda para la transmisión de voz y datos. Aunado
a esto, se ha dado un importante flujo de información en constante
actualización, que ha hecho a www.imcyc. com, el sitio más
buscado por profesionales, estudiantes y académicos, con cerca
de 2 millones de entradas mensuales a la página.
Finalmente, más no menos importante, resulta la presencia en
el IMCYC de pisos –y muros en algunos casos, como en los sanitarios–
de concreto oxidado, que no sólo resultan resistentes y de mínimo
mantenimiento, sino que le dan una calidez estética muy especial.
En suma: hoy, la sede del IMCYC es un inmueble más flexible y
confortable para los empleados que ahí laboran y para los que
nos visitan, acorde a los tiempos y que refleja la evolución
misma que se está dando al interior de este Instituto que en
el 2009, cumplirá 50 años de haber sido creado.