[ P O R T A DA ]

Control
del espacio

A
ÉREO

Victoria Orlaineta
Fotografías: Luis Gordoa

El diseño arquitectónico y la avanzada tecnología que permite la automatización demuestra con esta obra que una perfecta sinergia pueda dar por fruto una obra bella y altamente eficiente y productiva.
C
omo parte del programa de desconcentración de operacionesaéreas del Sistema Metropolitano de Aeropuertos (SMA), de 2004 a la fecha el Gobierno Federal ha invertido más de 600 millones de pesos en la ampliación y modernización de la infraestructura del Aeropuerto Internacional de Toluca, en el Estado de México.
DESCENTRALIZACIÓN AEREA
El SMA busca aprovechar la infraestructura aeroportuaria instalada en los estados limítrofes al Distrito Federal para distribuir y desconcentrar la demanda de operaciones que, como sabemos, se encontraba centralizada en una sola terminal aérea: el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).

Con una inversión superior a los mil millones de dólares destinados al fortalecimiento y expansión de las instalaciones, integrado por un aeropuerto central (AICM) y cuatro aeropuertos periféricos —Toluca, Puebla, Cuernavaca y Querétaro— el SMA sigue el esquema de otras grandes metrópolis como Nueva York, Londres o Washington, que cuentan con terminales aeroportuarias alternas.
Con la consolidación del SMA, no sólo se beneficia la desconcentración de pasajeros y de carga del AICM también se estimula el desarrollo y crecimiento de la industria y el comercio de estados como Puebla, Morelos, Querétaro y, por supuesto, el Estado de México. El SMA en su conjunto podrá realizar 700 mil operaciones y transportar 60 millones de pasajeros anualmente.

INICIA LA AMPLIACIÓN
El Aeropuerto de Toluca es fundamental dentro del programa de desconcentración de operaciones del SMA, resultando de gran relevancia su ampliación y modernización. El programa de obras comprende cuatro etapas acordes con las proyecciones de demanda que han expresado las líneas aéreas que operan desde ese aeropuerto, reafirmando su vocación como el primer eslabón del SMA, ofreciendo más y mejores servicios a los usuarios que opten por este punto de salida.
La primera etapa contempló la ampliación del edificio terminal de 1,300 a 1,700 metros cuadrados, la ampliación del estacionamiento principal de 150 a 600 lugares, la rehabilitación del área operativa del aeropuerto —pista, plataforma y calles de rodaje— y la construcción de una nueva torre de control e instalación de ayudas visuales para la Categoría III. Con estas acciones, el flujo de pasajeros se incrementó de 100 mil en 2004 a 170 mil en el 2005 mientras que, para el primer semestre de 2006 alcanzó la cifra de 568 mil pasajeros.

 
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Construcción y Tecnología®
Febrero 2007
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