Preparando superficies para recubrimientos

 

Kim Basham

Resumen:

Antes de aplicar un recubrimiento a una superficie de concreto hay que comprobar que la misma esté sana, limpia, libre de defectos superficiales, seca y  lo suficientemente áspera para tener buena adherencia. La lista de verificación que aquí se presenta es muy útil para evitar fallas en recubrimientos  

Cuando fallan los recubrimientos aplicados a superficies de concreto, la causa generalmente es la preparación inadecuada de la superficie. Para que un recubrimiento pueda adherirse apropiadamente, la superficie de concreto debe estar sana, limpia, libre de defectos superficiales y seca. La superficie debe también ser lo bastante áspera para establecer una buena adherencia mecánica. Si no está apropiadamente preparada, es posible que el recubrimiento se separe del concreto, desperdiciando tanto tiempo como dinero.

Antes de aplicar un recubrimiento decorativo o de protección a una superficie de concreto vertical u horizontal, revise las siguientes recomendaciones para evitar fallas causadas por una preparación inadecuada de la superficie. La lista de verificación trata de la limpieza y de cómo dar aspereza a las superficies de concreto, la reparación de defectos superficiales y la inspección de pruebas de superficies antes de aplicar el recubrimiento. Puesto que los métodos de preparación de la superficie pueden variar de un trabajo a otro, siga las recomendaciones que mejor se apliquen a su proyecto.

 

Realice una inspección preliminar

l Examine la superficie que se va a preparar en cuanto a la presencia de residuos, polvo, suciedad, aceite, grasa, lechosidad, mortero salpicado, eflorescencia, agentes de curado, selladores y otros contaminantes.

l Pruebe las losas para ver si hay lechosida-des, raspando la superficie con una espátula. La lechosidad es una capa débil de cemento y finos que son llevados a la superficie por el agua de sangrado. Si hay un material polvoso que pueda ser raspado de la superficie, significa que hay presencia excesiva de lechada y el recubrimiento no se adherirá apropiadamente.

l Si usted tiene planeado usar agua para limpiar la superficie, realice una prueba de humedad de la superficie existente para establecer una línea básica de la condición de humedad. Más adelante, en esta lista de verificación se describen varias pruebas comunes para la humedad.

 

Conozca los requisitos para la condición de la superficie

l Conozca y comprenda las especificaciones del proyecto para la preparación de la superficie y la aspereza requerida. A veces la aspereza se conoce como perfil de anclaje, y se logra raspando mecánicamente o picando con ácido la superficie del concreto (véase la figura arriba). Las especificaciones del proyecto deben decir cuán limpia y áspera debe ser la superficie antes de aplicarse un recubrimiento. Las especificaciones pueden también tratar la uniformidad de la superficie, la resistencia y la sequedad.

l Si las especificaciones dan una resistencia mínima de la superficie para asegurar la sanidad del concreto, utilice el procedimiento de pruebas en el campo delineado en el Apéndice A del ACI 503R-93.1 Esta prueba requiere fijar con epóxicos una tapa de un tubo estándar de 1 1/2 pulg. de diámetro al concreto, y medir la fuerza necesaria para desprender la tapa desde la superficie. La prueba puede usarse también para evaluar la necesidad y la pertinencia de la preparación de la superficie y las diferencias relativas en la resistencia de la superficie sobre el área que ha de ser recubierta. Típicamente, las especificaciones requieren una resistencia mínima de desprendimiento de 121 a 21 kg/cm2 (ASTM C 811-96).

l Lea y comprenda las indicaciones y recomendaciones para la preparación de la superficie proporcionadas por el fabricante del recubrimiento. Si las recomendaciones del fabricante no son compatibles con las especificaciones del proyecto, discuta esto en la reunión previa a la construcción.

 

Organice una junta de preconstrucción

l Reúnase con el ingeniero, el arquitecto y el propietario del proyecto antes de que empiece el trabajo, para discutir la selección del equipo, las técnicas de preparación de la superficie, el perfil de ésta y los requisitos de recubrimiento, programas y horarios. Ponga a consideración del ingeniero un plan de trabajo para su aprobación.

l Establezca los medios y la frecuencia de las pruebas y los resultados aceptables de las pruebas para la sanidad, limpieza y aspereza de la superficie.

l Si va a usarse agua para limpiar la superficie, discuta el efecto del tiempo de secado sobre el programa del proyecto. Establezca los medios y la frecuencia de las pruebas para el contenido de humedad.

l Para trabajos interiores, establezca niveles aceptables de ruido, polvo y humo. Para losas  de entrepisos, pregunte acerca de las restricciones de peso y vibración que podrían afectar la elección del equipo para la preparación de la superficie o el plan de trabajo. Presente un plan para el agua de desecho y los escombros que han de removerse.

 

Limpie la superficie

l Remueva todo el polvo suelto, la mugre y otros escombros, barriendo, aspirando o limpiando con aire o con una manguera de agua. Cuando barra, utilice una escoba industrial limpia, de cuerdas duras. Si va a limpiar con una aspiradora, utilice una industrial de trabajo pesado que quite todo el polvo de la superficie. Para sopleteado con aire, emplee una corriente de aire comprimido de 80 a 100 libras entregadas a través de una boquilla que se mantenga a aproximadamente a 60 cm de la superficie. Asegúrese de que la corriente de aire esté libre de aceites. Si va a limpiar con agua, utilice agua potable limpia a una presión lo suficientemente alta para remover el polvo, la mugre y los contaminantes superficiales solubles en agua. Puede ser también necesario refregar manualmente o con máquina la superficie con una brocha de cerdas duras. Estos métodos no tienen la intención de alterar el perfil de la superficie; únicamente la de limpiarla.

l Raspe y desprenda los depósitos pesados de aceite, grasa y otros contaminantes pobremente adheridos. Use después detergente o un emulsificador no solvente y un cepillo de cerdas duras para remover cualesquiera contaminantes que queden. No use solvente para remover el aceite o la grasa, ya que pueden extender los contaminantes a un área más grande o llevarlas más adentro en el concreto. Una buena solución limpiadora es el fosfato trisódico mezclado con agua caliente. Use al menos 30 g de fosfato trisódico por litro de agua. Para remover la grasa animal, utilice una solución a 10 por ciento de sosa cáustica. Asegúrese de echar abundante agua fresca a las áreas tratadas, hasta que todos los residuos de la solución de limpieza sean eliminados y el pH del agua de enjuague cumpla con los niveles aceptables.

l De ser necesario, remueva los depósitos pesados de aceite y grasa, limpiando con una corriente. Use detergente o un emulsificador no solvente para una mayor potencia de limpieza.

 

Limpie y dé aspereza a la superficie

l Cuando remueva recubrimientos elas-toméricos, utilice máquinas especiales para la remoción de recubrimientos, diseñadas para raspar estos materiales gruesos y flexibles, y luego continúe con las técnicas estándar para la preparación de superficies.

l Remueva las capas gruesas de mugre, lechosidad, eflorescencia, salpicaduras de mortero, compuestos de curado incompatibles y agentes descimbrantes, recubrimientos viejos y concreto no sano, raspando mecánicamente la superficie de concreto. Al hacerlo, se alterará su perfil, creando una superficie áspera rasposa y texturizada para la mejor adhesión del recubrimiento.

l Utilice escarificadores para remover puntos salientes y nivelar las losas, o esmeriles para reducir o remover las ligeras irregularidades de la superficie. Asegúrese de remover completamente todos los escombros y el polvo.

l Para superficies horizontales, utilice el sopleteado con proyectiles para limpiar y dar aspereza en un solo paso. El sopleteado y cepillado, o el picado ligero con ácido, crea una altura de perfil de 1.5 a 2 milésimas; el sopleteado estándar puede crear alturas de perfil que exceden de 8 milésimas. Asegúrese de comparar el grosor del recubrimiento con la altura del perfil de la superficie. Si se aplica una capa de una película fina (2.7 a 4 milésimas) sobre un perfil de 8 milésimas, la superficie recubierta estará áspera y dispareja. Puede ser necesario aplicar una o varias capas de imprimador para alisar la superficie.

l Si se preparan las superficies por sopleteado con proyectiles o escarificadores, tome las precauciones antes de aplicar un recubrimiento irrespirable. Al cortar la superficie superior del concreto, se abren poros en el mismo, permitiendo que el vapor de agua se escape más rápidamente. A fin de evitar la formación de burbujas y cráteres, considere la aplicación de múltiples capas de imprimador, o aplique el recubrimiento en la noche, cuando es menor la cantidad de vapor de agua que tiende a salir del concreto porque las temperaturas del aire y del concreto son similares.

l Utilice picado con ácido únicamente para áreas en donde no sean posibles otros métodos alternativos de limpieza. Pique con una relación de disolución de 10-90 a 20-80 de ácido hidroclorídrico de grado comercial (muriá-tico) en agua, aplicado en una proporción de 1.10 litros por metro cuadrado. Si no se permiten cloruros, use soluciones de ácido cítrico (20%) o ácido fosfórico (15%). Los ácidos cítrico y fosfórico no contienen cloruros, y no corroen el acero de refuerzo empotrado. Aplique la solución ácida usando un pulverizador a baja presión o un bote para rociar. Después de reducirse la acción de la espuma, lave abundantemente el área con mucha agua y friegue la superficie con un cepillo de cerdas duras. Un área que no muestre una acción espumosa indica que algún contaminante está bloqueando el ácido del concreto. El picado debe crear un perfil similar a la textura de una lija fina.

l Cuando se han usado endurecedores de piso, deben utilizarse métodos especiales para preparar la superficie para un recubrimiento. Pida al fabricante del recubrimiento algunas sugerencias.

 

Repare los defectos superficiales

l Cincele, esmerile o marteline los bordes, las salpicaduras de mortero u otras protuberancias de las superficies de concreto. Remueva todas las proyecciones mayores de 0.15 cm.

l Remueva el concreto no sano y limpie y rellene los agujeros, astillas, descascaramien-tos, grietas, áreas alveoladas y otros defectos de superficie con una lechada comercial a base de cemento portland, un compuesto epóxico o algún otro material de resane patentado. Repare todos los defectos que sean más anchos de 0.30 cm. Al cincelar a lo largo de los bordes de las áreas de reparación, no cree un bisel. Cincele los bordes de modo que sean perpendiculares a la superficie, o corte los bordes con sierra formando una ligera muesca.

l Obtenga recomendaciones específicas de los fabricantes del recubrimiento y del material de reparación acerca de la compatibilidad de los materiales y los procedimientos para la preparación de la superficie. Por ejemplo, determine el tiempo de curado para el material de reparación y determine si el resane debe tener un acabado áspero o alisado con llana de acero. No recubra los resanes antes de que se hayan curado, a menos que el fabricante indique otra cosa.

 

Inspeccione y pruebe la superficie antes del recubrimiento

l Pruebe la existencia de polvo limpiando la superficie con un trapo oscuro. Si hay polvo en el trapo, entonces el área está demasiado pol-vosa y debe limpiarse nuevamente.

l Salpique agua en la superficie seca. Si la superficie está libre de aceite y polvo, el agua se esparcirá inmediatamente en vez de formar pequeñas gotas. Si se forman pequeñas gotas, entonces la superficie es demasiado aceitosa o polvosa para la aplicación del recubrimiento.

l Si se usó ácido u otras soluciones químicas para limpiar la superficie, utilice papel pH para determinar la acidez en la superficie de concreto. Repita la operación de lavado con agua abundante si el nivel del pH es menor de 4.

l Pruebe el contenido de humedad empleando uno o más de los siguientes métodos:

1.  Pegue perfectamente a la superficie de concreto con una cinta adhesiva, una hoja de 45 x 45 cm de una película clara de polietileno, aproximadamente de 1.5 milésimas de grosor, y permítale permanecer en el lugar durante al menos 16 horas. Esta es una prueba estándar descrita en el ASTM D 4263-83 (véase el cuadro). Si se acumula humedad por debajo del plástico, entonces muy probablemente el contenido de humedad del concreto es demasiado alto y el recubrimiento fallará.

2.  Para medir la proporción de emisión de humedad-vapor, coloque una cantidad medida de cloruro de calcio en un plato dentro de una cubierta de plástico transparente que esté sellada al piso. Después de 60 a 72 horas, pese el cloruro de calcio para determinar la cantidad de agua absorbida. La velocidad de emisión de humedad y vapor se calcula en gramos de agua por cada 97 m2 en un periodo de 24 horas. Compare la velocidad medida de emisión de humedad y vapor a los valores aceptables proporcionados por el fabricante de recubrimiento.

3.  Use un medidor de humedad de superficie y compare el valor medido con las recomendaciones del fabricante del recubrimiento.

l Mida la temperatura de la superficie de concreto antes de aplicar un recubrimiento y compare el resultado con las recomendaciones del fabricante. Si la superficie es demasiado fría o caliente, la adherencia del recubrimiento y la calidad total general del trabajo puede ser afectada adversamente.

l Prepare un área de pruebas para verificar la pertinencia de la preparación de la superficie. Aplique el recubrimiento a un área típicamente preparada bajo las mismas condiciones de humedad de superficie y temperatura ambiente que existirá durante la aplicación real del recubrimiento. Después que haya curado el recubrimiento, verifique la adherencia. Desafortunadamente, no existen métodos estándar para evaluar las resistencias de adherencia de los recubrimientos. Para saber más sobre los métodos de prueba recomendados, pregunte al fabricante del recubrimiento. Además, use resanes de prueba para evaluar los diferentes métodos de preparación de la superficie a fin de determinar cuál es el más adecuado.

REFERENCIAS

1.  ACI 503R-93, Use of Epoxy Compounds with Concrete. American Concrete Institute, Farmington Hills, Mich., 1993.

2.  Ray M. Reed, “Sound, Clean, and Dry”, Concrete Repair Digest, junio-julio de 1993, pp. 127-129.

3. “Perspectives on Surface Preparation”, Concrete Repair Digest, febrero-marzo de 1995, pp. 12-14.

4.       Selecting and Specifying Concrete Surface Preparation for Sealers, Coatings and Polymer Overlays, Guideline núm. 03732, International Concrete Repair Institute, Sterling, Va., 1997.

Estándares de la ASTM que hay que conocer

Los siguientes estándares de la ASTM pueden servir como guías útiles cuando se esté preparando superficies de concreto. Para adquirir copias de estos estándares, llame a la ASTM al 610-832-9500, o visítenos en el sitio de Internet de la ASTM (www.astm.org).

l Práctica Estándar para la Limpieza de Superficies de Concreto para el Recubrimiento (D 4258-83)

l Práctica Estándar para la Abrasión del Concreto (D 4259-88)

l Práctica Estándar para el Picado con Ácido del Concreto (D 4260.88)

l Método de Prueba para el pH de Superficies de Concreto Limpiadas

      Químicamente o con Picado Ácido (D 4262-83)

l Método de Prueba para Indicar la Humedad en el Concreto por el Método

     de Sabana Plástica (D 4263-83)

l Método de Prueba para Indicar el Aceite o el Agua en Aire Comprimido (D 4285-83)

l Práctica Estándar para la Preparación de la Superficie de Concreto para la Aplicación de Acabados de Superficie Monolítica de Resinas con Resistencia Química (C 811-96)

 

   

 

 

 

 

 

Instituto Mexicano del Cemento y del Concreto, A.C.
Revista Construcción y Tecnología 
Julio 2000
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