PAVIMENTOS
Recubrimientos para pisos y losas
Las denominadas poliureas poliaspárticas son bastante nuevas
en el mercado; sin embargo, tienen un enorme potencial para el concreto
decorativo gracias a sus variadas y únicas cualidades. Por esta
razón, los contratistas en la actualidad las están usando
como capas transparentes sobre acabados tales como concreto estampado,
teñido, coloreado así como recubrimientos pigmentados,
lo que incluye la adición de medios decorativos. Cabe decir que
también hay algo de experimentación con la aplicación
en trabajo decorativo de losas exteriores sobre terreno. Pero, reflexionemos
un poco en torno a la historia de estos productos.
Historia
Los esteres aspárticos fueron inventados y patentados por la
compañía Bayer Corp., en los años noventa. Después
vinieron las resinas aspárticas y además, el fabricante
descubrió que podían formarse películas que resultaban
muy densas y brillantes, llevando a la creación de las poliureas
alifáticas poliaspárticas. En la actualidad, varias compañías
han introducido formulaciones que los contratistas pueden usar comercialmente.
Sus formulaciones comparten varias propiedades comunes, pero hay también
beneficios y precauciones únicas para cada producto en el mercado.
Las poliureas son materiales que tienen dos componentes. El sistema
trabaja cuando una resina es mezclada con un catalítico —usualmente
un poli-isocianato— el cual provoca una reacción y desarrolla
un compuesto de polímero. Los primeros que se introdujeron en
el mercado fueron las poliureas aromáticas; sin embargo, su instalación
requería de la existencia de un costoso equipo de pulverización
que mezclaba las partes A y B juntas en la punta del pulverizador, siguiendo
el endurecimiento del material pocos segundos más tarde. Cabe
decir que las poliureas aromáticas también son susceptibles
de degradación ultravioleta (UV) como la superficie de la membrana.
Propiedades sobresalientes
En los últimos dos años varias compañías
han introducido los productos de poliurea poliaspártica con características
sobresalientes en comparación con otros materiales de recubrimiento:
• Pueden ser aplicados a temperaturas tan bajas de hasta –34
°C y tan altas de hasta 60 °C, dependiendo del producto. En
climas cálidos y fríos, los contratistas pueden instalarlos
durante todo el año.
• Cuando se curan, pueden tolerar temperaturas tan altas de hasta
180 °C.
• Son estables ante los rayos UV, suministrando acabados “transparentes
como el agua”.
• Las poliureas tienen una resistencia mucho más grande
a la abrasión y al impacto que los recubrimientos
de epóxicos o de uretanos.
• Estos productos no se enrojecen ni se ponen blancos.
• El curado es rápido y el trabajo puede ser entregado
a los propietarios para usarse a las dos horas después de haber
sido aplicado.
• La alta humedad ambiental no restringe su aplicación,
aunque algunos productos fraguan más rápidamente cuando
hay mucha humedad.
• No se manchan, resisten la penetración de grasas y aceites,
y el concreto es protegido contra ácidos suaves.
• Las poliureas tienen excelentes características de mojado
y penetración, lo que significa que forman adherencias excelentes
al concreto.
Referencia: Concrete Producer, octubre de
2006.
PREFABRICADOS
Acabados de concreto decorativo
El trabajo del concreto coloreado exige las mejores prácticas
de colocación y acabado amén de todo el cuidado posible
para obtener resultados uniformes y satisfactorios. Así, las
grandes dosis de óxido y pigmento pueden reducir la resistencia
y calidad del concreto resultante.
Variación del color
Las variaciones en el color del concreto acabado, pueden deberse a:
• Una extrema variación en el revenimiento.
• La técnica de curado.
• La exposición a la luz solar.
• Un acabado inconsistente.
• A la introducción de materiales extraños en el
sitio.
• A un cambio en las materias primas del concreto.
• A la aplicación manual no uniforme del óxido.
• A una mano de obra inadecuada.
Acabado
Toda la superficie del concreto debe tener un allanado consistente para
asegurar que una parte de la losa no sea allanada en un estado ‘aguado’,
y la otra parte lo sea cuando esté casi seca. Una cantidad excesiva
de agua de mezclado traerá los finos a la superficie durante
el allanado. La superficie resultante será entonces de un color
más claro; el allanado excesivo tendrá el mismo efecto.
Curado
Una de las características más importantes en la obra
es que el concreto debe ser mantenido en una condición húmeda
al menos por una semana. El concreto entonces tiene tiempo para endurecerse
apropiadamente sin una evaporación indebidamente rápida
del agua de mezclado. Esto reduce el riesgo de traer a la superficie
las sales que causan eflorescencia. Una vez que se haya realizado el
curado adecuado, el concreto debe ser tratado con un agente sellador
de calidad.
Concreto de agregado expuesto
Éste ofrece una gran variedad de colores y acabados. La naturaleza
del agregado y la pericia en la colocación tendrán un
efecto importante en la apariencia terminada del concreto.
Agregado
El agregado es un producto de la naturaleza; debido a su carácter
inherente, ocurren variaciones en su consistencia, apariencia, calidad
y textura. Cualquier muestra de agregado es sólo un indicador
de lo que puede esperarse en la superficie acabada.
Colocación
Para un acabado texturizado consistente asegúrese de que:
• Los moldes sean impermeables al agua.
• Se logre una compactación satisfactoria y uniforme.
• No se agregue agua durante la descarga.
Acabado
La superficie del concreto debe ser tratada con un retardador de superficie
de calidad para asegurar un tiempo de fraguado consistente de la superficie
que ha de ser expuesta. Se recomiendan productos patentados retardadores
de superficie. Nunca debe de usarse azúcar. Para la pavimentación
con concreto en sitios donde haya pendiente, se requiere de particular
cuidado para lograr la compactación y el acabado uniformes.
Curado
El concreto debe ser curado en húmedo por tanto tiempo como sea
posible, de acuerdo con las buenas prácticas de colado del concreto.
Además, debe de aplicarse un agente sellador de calidad, el cual:
inhibirá
el ensuciado de la superficie; minimizará la oxidación
del agregado y acentuará el color del agregado.
Juntas
Para reducir el riesgo de agrietamiento no planeado, se necesita tener
un cuidado especial en la ubicación de las juntas con los acabados
decorativos. Debe subrayarse que el acabado del concreto es tan bueno
solo en la medida en que lo sean las técnicas de colocación
y acabado.
Referencia: Australian Pre-mixed Concrete
Association.
PREMEZCLADOS
Concreto con fibras 1a parte
Sin lugar a dudas, uno de los productos con valor agregado que, al
parecer, tiene aplicación en casi cualquier tipo de mercado es
el que tiene que ver con las fibras. De ahí que en este texto
se busca disertar de manera breve pero concisa acerca de cómo
se usan típicamente las fibras, cuál es su proposición
en cuanto a valor así como algunas prácticas para incrementar
el ritmo de penetración en el mercado estadounidense. El concreto
con fibras y con mayor valor agregado es, presumiblemente, el que más
se vende en todos los Estados Unidos actualmente. Usadas las fibras
inicialmente para reducir el agrietamiento por contracción plástica
del concreto, el mercado consistía principalmente en la presencia
de fibras sintéticas de polipropileno y nylon. Estos productos
iniciales eran fibras largas y gruesas que, aunque eran efectivas, resultaban
difíciles de acabar y producían losas de concreto “con
pelos”. A pesar de estas dificultades, su uso creció de
manera importante con el paso del tiempo. Al madurar el mercado se vio
que se fueron introduciendo productos de fibras más cortas y
delgadas, al punto que se volvieron invisibles en las losas.
Estos tipos de productos llevaron a la situación que pudiera
denominarse como “Prevención de grietas”. Al interceptar
diminutas grietas, las fibras evitan que lleguen a formar grietas grandes
y visibles. Este es el punto más apetecible del mercado y en
donde estará enfocada la mayor parte de la reflexión que
aquí se presenta. Todo especialista sabe que el concreto va a
agrietarse.
Eso es algo que resulta inevitable. Sin embargo, al usar fibras junto
con una disposición apropiada de las juntas, se puede generar
un concreto que sea durable, atractivo, y que sea visto de manera positiva
por los ojos del propietario o cliente. Otras aplicaciones de fibras
pueden servir para mantener las grietas rígidamente juntas, lo
que puede denominarse “Confinación de grietas”. Como
conocedores del tema, se sabe que el concreto va a agrietarse, pero
¿a qué ancho de grietas la apariencia se convierte en
algo inadecuado para el propietario o cliente? Esta es una cuestión
de percepción; sin embargo, aplicando las dosis adecuadas de
fibras sintéticas más grandes, macrofibras sintéticas,
productos combinados de acero/sintéticos o fibras de vidrio o
acero, se puede resolver este problema que, como sabemos, resulta muy
común.
Otra aplicación de las fibras que apenas comienza a tomar forma
es el uso de altas dosis, en las cuáles o bien se desea flexibilidad
de la matriz del concreto, o se eleva el desempeño estructural
o bien, en pisos industriales en donde por muchos años, su uso
ha probado ser efectivo para reducir los problemas de desempeño
de las juntas por las pesadas cargas en las llantas. Pero volviendo
al meollo del asunto: el enfoque actualmente está en la prevención
de grietas por contracción.
Se supone que el 50% del mercado de concreto premezclado es para trabajos
de superficies planas como losas, losas elevadas, muros tilt-up, etcétera.
En este sentido, el mercado potencial para fibras —tan sólo
en los Estados Unidos— fue de 173 millones de metros cúbicos
en 2006. Si se multiplica eso por el precio de venta promedio por metro
cúbico en su mercado, se podrá ver porqué se hace
una disertación sobre un producto con un valor agregado gracias
a las fibras. Es asombroso el valor del mercado que nuestra industria
puede capturar. De modo que no queda duda sobre cuáles son las
barreras que quedan por franquear y cómo podemos exitosamente
obtener una mayor cuota del mercado. Referencia: El autor de este texto
es A. Vance Pool, Director Senior de Recursos Naturales, de la National
Ready Mixed Concrete Association (NRMCA). El documento apareció
en la revista Concrete In focus, otoño de 2007.
Si desea, puede consultar la página
web de la NRMCA: www.nrmca.org.
ACERO DE REFUERZO
Separadores para
concreto estructural 1a parte
Los separadores son elementos frecuentes en la práctica constructiva
con concreto al garantizar el recubrimiento del acero de refuerzo y
dar una protección adecuada frente a los agentes agresivos. En
el mercado hay distintos sistemas y soluciones para este tipo de dispositivos;
de ahí la conveniencia de revisar los conceptos básicos
a tomarse en cuenta al elegir un producto de este tipo. Los separadores
o distanciadores se emplean en el concreto estructural con una misión
fundamental: garantizar la posición del acero de refuerzo en
relación a las cimbras o moldes, proporcionando un adecuado recubrimiento
y protección del mismo. El uso de separadores es tradicional
en países como Estados Unidos o el Reino Unido, pero es reciente
en países como España. De hecho, allá, hasta hace
menos de 10 años su uso se reducía a la prefabricación,
donde las tolerancias son muy ajustadas y es preciso evitar que se produzcan
daños en los moldes para garantizar su reutilización y
el adecuado acabado de las piezas.
Los primeros intentos para que el sector de la construcción usara
estos dispositivos —tratando de mejorar la durabilidad de las
estructuras— se dieron con el Grupo Español del Hormigón
(CEHO) que publica la traducción de un documento de la Comisión
Permanente VII Armaduras, Tecnología y Control de Calidad, del
Comité Europeo del Hormigón sobre recomendaciones para
el empleo de separadores, calzas y amarre de armaduras. Este documento
influyó entre los técnicos responsables de la elaboración
de la reglamentación técnica en materia de concreto estructural,
incorporándose la obligación del uso de separadores en
la Instrucción EHE [1] aprobada en 1998. Desde entonces, el empleo
de separadores ha ido aumentando y han proliferado todo tipo de productos,
sistemas y dispositivos con eficacia y operatividad diferentes, lo que
pone de manifiesto la necesidad de regular su uso y características
para obtener mejores resultados.
Conceptos básicos
El primero de los conceptos básicos es el del recubrimiento,
definido como "la distancia entre la superficie exterior del acero
de refuerzo (incluyendo anillos y estribos) y la superficie del concreto
más cercana". El fin del recubrimiento es proporcionar una
protección adecuada a las armaduras de acero embebidas en el
concreto. Esta protección se logra mediante la suma de diversos
factores como:
• La calidad adecuada del concreto, obtenida a través de
su composición: tipo y cantidad de cemento, relación agua/cemento,
etc.; de su puesta en obra: colado, compactación y curado.
• Un espesor suficiente que retrase con el paso del tiempo la
llegada de los agentes agresivos hasta el acero. El período durante
el cual el concreto del recubrimiento protege al acero de refuerzo está
en función del cuadrado de su espesor; esto conlleva que una
disminución del recubrimiento a la mitad de su valor se traduce
en un período de protección del acero de refuerzo reducido
a la cuarta parte.
• Un espesor adecuado al tamaño máximo del agregado
usado en el proporcionamiento del concreto y al diámetro del
acero de refuerzo principal, para evitar que se produzcan segregación
y nidos de grava que dejen al acero de refuerzo expuesto a la acción
directa de los agentes agresivos. Por esta razón el espesor del
recubrimiento no puede ser inferior al diámetro del acero de
refuerzo principal (o diámetro equivalente si se disponen grupos
de barras), ni a 0.80 veces el tamaño máximo del agregado
utilizado, valor que ha de aumentarse hasta 1.25 si la disposición
del acero de refuerzo dificulta el paso del concreto.
• La limitación de la fisuración en las piezas sometidas
a flexión.
En el proyecto se especifica un valor nominal del recubrimiento, resultado
de la suma del recubrimiento mínimo que es preciso garantizar
al acero de refuerzo, y de una tolerancia —denominada margen de
recubrimiento— que tiene en cuenta el tipo de control de ejecución
que se está llevando a cabo en el elemento, y que adopta el valor
de 10 mm en los casos normales, 5 mm para el caso de nivel de control
de ejecución intenso y 0 mm para elementos prefabricados.
rnom = rmin + ? r
El valor del recubrimiento mínimo que contempla la Instrucción
EHE [1] está en función del tipo de ambiente agresivo
al que esté expuesto el elemento, y adopta los valores de acuerdo
a la resistencia a la compresión del concreto, el tipo de elemento
y el recubrimiento según la clase de exposición a la que
se exponga el elemento. Por lo tanto, el valor del recubrimiento está
relacionado con la durabilidad de los elementos de concreto, y también
con los conceptos de sustentabilidad que se están imponiendo
en todas las reglamentaciones españolas, y que está siendo
recogido en la nueva Instrucción de Hormigón Estructural
que se está elaborando. En efecto, la versión 0 de la
revisión de la nueva Instrucción [2] —referida como
EHE-O— establece como pilar de la sustentabilidad de las estructuras
de concreto el poder garantizar para las mismas una dilatada vida de
servicio, entendida como el periodo durante el cual las exigencias básicas
de la estructura se mantienen en unos niveles aceptables, realizándose
actuaciones de conservación ordinaria que no impliquen operaciones
de rehabilitación.
Aunque la duración de esta vida útil la ha de definir
la propiedad, la EHE-O. Los recubrimientos mínimos propuestos
por esta instrucción para el concreto reforzado están
en función de: la clase de exposición, el tipo de cemento,
la resistencia característica del concreto y la vida útil
del proyecto, en años. Brinda ejemplos concretos en los que este
periodo comprende entre 3 años, para las estructuras de carácter
temporal, hasta los 100 años para puentes de más de 10
metros de longitud. En el caso de edificios residenciales y oficinas
el periodo de vida útil establecido es de 50 años, que
se eleva hasta 75 años si se trata de edificios públicos.
Referencia: revista Cemento Hormigón,
noviembre de 2007.