PREMEZCLADOS
El control de calidad de
la arena
El control de calidad para la producción de agregados sólo
se logra cuidando el proceso y control del mismo. Si se añade
un proceso se suma dinero a la producción del agregado, mientras
que el producto resultante reducirá el costo total de la producción
en dólares. Se suele oír: “A nosotros no nos importa
lo que nos den, sólo asegúrense de que siempre sea lo
mismo.” Aunque esto puede ser bueno para algunos productores,
aquellos con un fuerte deseo de mejorar la calidad buscarán soluciones
de alta calidad.
Los defectos representan un costo importante para productores de concreto
y de asfalto. Los defectos en el producto final son el resultado de
variaciones en el proceso de producción. Si la variación
se nota antes o durante el proceso de producción, entonces puede
hacerse alguna concesión para mitigar su efecto. En la mayoría
de los casos, la cuestión de la calidad que causa el defecto
no se nota y el resultado es una falla en el producto final. Esto aumenta
significativamente el costo del proceso.
Una vez que el agregado es llevado a la pila de existencia, queda sometido
a los elementos y a su manejo. Dependiendo del agregado, esto puede
alterar la calidad. El rompimiento, la contaminación y las variaciones
en el contenido de agua son problemas comunes que tienen un efecto en
el desempeño del agregado en los productos finales, tales como
el concreto. Para compensar esto, el cliente final agrega un poquito
más de cemento para asegurar que sus productos satisfagan los
requisitos de calidad. Esto viene a incrementar el costo total de la
producción. Si el agregado se lleva directamente al producto
final, entonces no ocurre este cambio en la calidad.
Las demandas del mercado no se pueden determinar con
precisión para que pueda ser igualado en la planta de producción.
Los clientes que valoran el tener un control de calidad más alto
sobre los requerimientos del agregado se están movilizando para
incrementar los procesos y el control del proceso. Algunos clientes
han visto la necesidad de controlar lo que se produce en la planta.
Todos los agregados se avisan a los silos de modo que pueden reportarse
directamente a la planta de concreto. Este tipo de cliente desea llegar
a ser un proveedor de arena manufacturada de calidad más alta
tanto para los productores de premezclados como de los prefabricados.
El control de calidad que se ejerce sobre los productos asegurará
un producto de mejor calidad y un valor de mercado más alto.
La clasificación de los “fillers” ofrece un medio
de control efectivo sobre la granulometría de la arena. Para
el concreto, la fracción de arena tiene una influencia muy grande
en el desempeño. El controlar la granulometría a través
de un proceso mejorado agregará valor al producto y a la calidad
final del agregado.
Conclusión
La arena manufacturada puede usarse exitosamente en
el concreto. Su uso depende de lograr la granulometría correcta
y la forma adecuada de las partículas para limitar la demanda
de agua. Si se logran estas propiedades para proveer una arena de alta
calidad, entonces el desempeño en el estado endurecido puede
ser mejor que el de la arena natural. El empleo de la clasificación
por aire para remover el “filler” de la arena ha permitido
controlar el proceso de la manufactura de la arena. La arena producida
por medio de una planta de trituración y cribado puede permitir
que el “filler” sea removido, de modo que pueda utilizarse
como un “filler” en las mezclas de concreto. La industria
de agregados necesita adoptar una visión holística de
la producción de concreto. La producción de agregados
de calidad más alta reducirá el costo total de la producción.
El mejoramiento en la calidad no sólo afecta los costos de producción,
sino que ayuda a evitar fallas en el campo. c
Referencia: World
Cement, abril de 2008.
TUNELES
Concreto lanzado en túneles
Durante el siglo pasado el método del concreto lanzado reemplazó
a los métodos tradicionales de revestimiento de los perfiles
de un túnel y llegó a ser fundamental en la cimentación
del tramo o sección del túnel excavado. En la actualidad,
no se concibe la perforación de túneles sin el concreto
lanzado. El concreto lanzado es un único término que describe
diversas partes de una tecnología completa: el material; el proceso
y el sistema del concreto lanzado. Estos tres componentes definen una
tecnología completa que tiene una larga tradición, un
enorme potencial para la innovación y un gran futuro.
El concreto lanzado –que se comenzó a usar en 1914–
es una dosificación de una mezcla del concreto determinada por
los requerimientos de la aplicación y por parámetros específicos.
Por regla general, esto significa una reducción de la granulometría
máxima de las partículas a 8 mm o como máximo 16
mm, un incremento del contenido de aglomerante y el uso de aditivos
especiales en el concreto lanzado para controlar las propiedades del
material. En la actualidad, existen dos procesos de concreto lanzado
diferentes: por vía seca o por vía húmeda.
Los requisitos principales de la mezcla se centralizan en la trabajabilidad
(bombeo, aplicación por proyección) y la durabilidad.
Ellos son: alta resistencia inicial; características adecuadas
de fraguado del concreto; fácil trabajabilidad (tiempos abiertos
prolongados); proceso de bombeo adecuado (caudal de flujo denso); buena
proyección (maleabilidad) y rebote mínimo.
El proceso de concreto lanzado define su instalación. Después
de producido, el concreto es transportado por medios convencionales
al equipo de procesado. El concreto lanzado se bombea hasta el punto
donde se colocará a través de tubos o mangueras herméticas
resistentes a las altas presiones para su proyección.
El proceso de concreto lanzado puede ser utilizado para diferentes
aplicaciones. El concreto o el mortero lanzado se usan para reparaciones
de concreto, perforación de túneles y de minas, estabilización
de planos inclinados e incluso para los diseños artísticos
en los edificios. La construcción con concreto lanzado tiene
varias ventajas:
La aplicación sobre cualquier fachada debido a que el concreto
lanzado se adhiere inmediatamente y soporta su propio peso. La posibilidad
de aplicarlo en sustratos poco uniformes. Una configuración totalmente
flexible del espesor de la capa en obra. La posibilidad de un concreto
lanzado reforzado es que se puede lograr un revestimiento con una capacidad
portante rápida sin cimbras ni prolongados periodos de espera.
Cabe decir que el concreto lanzado es un método de construcción
flexible, económico y rápido pero requiere de un alto
grado de mecanización y es de suma importancia contar con mano
de obra calificada.
La construcción con concreto lanzado se utiliza en distintos
tipos de proyectos. La flexibilidad y la economía de este material
se destacan en construcciones a cielo abierto o subterráneo,
en la perforación de túneles y en construcciones subterráneas
especiales. De hecho, se utiliza en toda la industria de la construcción.
Los siguientes usos son los más extendidos: Estabilización
de la excavación en la perforación de túneles y
en las construcciones subterráneas. Revestimiento de túneles
y de cámaras subterráneas. Estabilización en la
construcción de minas y de galerías. Reparación
de concreto (reemplazo y reforzamiento). Restauración de edificios
históricos (estructuras de piedra). Estabilización en
la apertura de zanjas. Estructuras ligeras especiales con capacidad
portante y Aplicaciones creativas.
Referencia: Shocrete
Magazine, Vol 8 núm 2, primavera 2008, y Vol 9 num,4, otoño
de 2007.
PREFABRICADOS
Losas
de concreto hermético
El concreto “hermético” es un asunto controversial
y con frecuencia se confunde con el término concreto “impermeable”.
El concreto es una mezcla de materiales aglomerados por una pasta de
cemento porosa. El paso del agua a través del concreto es posible
por medio de un sistema capilar de trayectorias que ligan estos poros.
Al adoptar las mejores prácticas, esta pequeña cantidad
de agua no afecta la condición del servicio final y por lo tanto,
permite al diseñador referirse a este elemento particular como
hermético al agua. Debido a su naturaleza porosa no nos referiremos
a cualquier elemento de concreto como “impermeable al agua”.
El Instituto de Concreto de Australia, define la hermeticidad al agua
del elemento de concreto como: “impermeable al agua, excepto cuando
está bajo presión hidrostática suficiente para
producir discontinuidad estructural por ruptura”. En muchas normas
internacionales se hace referencia al concreto hermético al agua
únicamente en casos específicos relacionados con estructuras
para la retención de líquidos o estructuras expuestas
a condiciones severas. El AS 3600 también guarda silencio con
respecto a la hermeticidad al agua de las losas de concreto. Sin embargo,
se puede inferir de las secciones de la norma que define los grados
de control de grietas. Limitando la posibilidad de agrietamiento y de
los anchos de las grietas, el diseñador es capaz de lograr una
losa hermética al agua.
Existen muchos factores que pueden influir en la capacidad de un elemento
de concreto para ser considerado hermético al agua. Los factores
que hay que considerar son: diseño estructural; detallado para
miembros de restricción; mezcla de concreto; colocación,
compactación y acabado del concreto; condiciones ambientales
(lluvia, viento, clima cálido, etc.), y curado del concreto.
Utilizando técnicas de postensado es posible alcanzar un diseño
que casi no provea esfuerzos de tensión por flexión en
la dirección primaria, conduciendo de este modo a condiciones
de no agrietamiento bajo cargas de servicio. En la dirección
secundaria la hermeticidad al agua puede lograrse combinando niveles
apropiados de presfuerzo y refuerzo para el control del agrietamiento.
El AS 3600 (cláusula 9.4.3) proporciona los requisitos con base
en las clasificaciones de exposición y condiciones de restricción
para que esto sea satisfecho. Generalmente se acepta que los niveles
de compresión residual (P/A) entre 1.8 -2.0 MPa, más la
inclusión de mallas de refuerzo satisfacen estos requisitos.
Para lograr exitosamente un elemento hermético al agua, es imperativo
que las condiciones de restricción se examinen con mucho detalle.
Los colados muy grandes y los elementos verticales –tales como
columnas y muros– pueden crear acciones de restricción
importantes que pueden hacer que se desarrollen grietas. En tales casos,
se requiere de atención a los detalles y el aislamiento apropiado
de los miembros para aliviar los esfuerzos resultantes y aliviar el
riesgo de agrietamiento. Es importante la elección del diseño
de la mezcla. Típicamente para los elementos herméticos
al agua los esfuerzos de contracción dentro del concreto deben
ser limitados. Similarmente, la mezcla debe ser proporcionada de modo
que se evite el agrietamiento térmico temprano en el estado plástico
y debe ser suficiente en la ganancia de resistencia para aplicar un
nivel de esfuerzo nominal de 25% a las 24 horas (9 MPa).
Los factores que afectan el resultado final del elemento de concreto
se determinan en gran medida por la colocación del concreto en
la cimbra en el sitio de la obra. Es esencial que ocurran las mejores
prácticas en términos de compactación adecuada
del concreto y que el acabado del concreto se comience y se complete
en el momento correcto. El acabado temprano del concreto puede ser perjudicial,
dando como resultado sangrado excesivo de la mezcla y, por lo tanto,
excesiva evaporación de agua. El clima cálido y los fuertes
vientos pueden causar una rápida evaporación de la mezcla,
llevando a un secado rápido y dando como resultado mayores esfuerzos
de tensión en la superficie de más arriba, con lo que
pueden desarrollarse grietas. En estos casos debe realizarse el curado
rápido y eficiente del concreto, lo que evitará y reducirá
la tasa de evaporación del agua desde el concreto en el estado
plástico. Con la debida atención al diseño, al
detallado y a los métodos de colocación del concreto,
puede lograrse una estructura postensada hermética al agua para
una gran variedad de proyectos tales como losas para techos, muros,
contenedores, represas, etc.
Referencia: Concrete
in Australia, Vol. 34 No. 1.
TUBOS
Durabilidad
para los tubos de concreto
3a. parte
Al tender tuberías en entornos potencialmente agresivos, el
aspecto más importante –durante los estudios detallados–
es el de determinar estos factores de influencia agresivos y a continuación
–durante la producción de los tubos– tomar las medidas
necesarias que garanticen una durabilidad suficiente. Aun cuando las
medidas necesarias en condiciones agresivas pueden incrementar los costos
de la tubería entre un 20% y un 100%, los costos de mantenimiento
durante la vida útil de la tubería descienden considerablemente,
ante todo, cuando ésta presenta una duración de uso de
proyecto de 100 años. Por el otro lado, los estudios detallados
pueden resultar de tal modo que no se necesita ninguna medida especial
para protección de la tubería. Los costos de una tubería
de este tipo, son más bajos que si prematuramente se omite el
estudio y se selecciona en lugar de ello un proyecto conservador.
Tuberías expuestas a la atmósfera
En tubos con reducidos diámetros, no son necesarias medidas especiales
durante la fabricación. Con el incremento del espesor de la pared
deben considerarse los fenómenos de la fatiga debido a los ciclos
de temperatura. Mientras que en este caso la armadura anular en tubos
estándar es suficiente para absorber la mayoría de las
dilataciones de los anillos de los tubos, para evitar problemas, se
debe incrementar la proporción de armadura longitudinal. Este
problema no se presenta en tubos con espesores de pared hasta 180 mm.
La teoría, que fue desarrollada para el esclarecimiento de los
procesos en tubos con espesor de pared de 230 mm, muestra que en estos
tubos el refuerzo de la armadura longitudinal sola no es suficiente
para la eliminación del problema. El análisis muestra
que se pueden presentar problemas para los ciclos de temperatura, fundamentalmente
también en tubos de paredes finas con espesores de hasta 120
mm.
Hasta que se hayan esclarecido todas estas relaciones se propone producir
con espesores de pared reducidos los tubos expuestos a la atmósfera
y prever suficiente armadura longitudinal para el control de formación
de fisuras. Cuando se alcanzan o superan espesores de pared de 180 mm,
se deben tomar medidas adicionales para el aislamiento y protección
de los tubos. Adicionalmente, los tubos que están fijados a otras
estructuras –por ejemplo, puentes– puedan deformarse libremente.
Un impedimento de deformación por la estructura adyacente, conduce
a deformaciones localizadas en juntas entre tramos individuales de tubos,
con la que están expuestas a grandes tensiones.
Efectos combinados sobre tuberías
de aguas residuales
Los aspectos hidráulicos son determinantes en las corrosiones
de tuberías de aguas residuales. Cuando las aguas residuales
se encuentran en un estado anaeróbico, p.ej. con reducida velocidad
de flujo o durante tiempos prolongados de retención (> 1 hora)
en los tubos de acometida y colectores de aguas residuales se acumula
sulfuro, del cual una gran parte puede estar constituida de ácido
sulfhídrico. Cuando estas aguas residuales fluyen hacia abajo
por un desnivel pronunciado, se desprende el gas de las aguas residuales,
en función de las turbulencias generadas.
Siempre que sea posible, la pendiente de las tuberías de aguas
residuales debe ser seleccionada para impedir condiciones extremas de
flujo y por ello se minimice tanto la formación como también
la liberación de ácido sulfhídrico. Si esto no
es posible, o si a pesar de estas medidas aún existe un riesgo
de corrosión, se ofrecen dos medidas preventivas fundamentales,
dependiendo del espesor del problema de corrosión previsto, a
saber, la mejora del proyecto de mezcla de concreto o la aplicación
de un recubrimiento de protección.
Modificación de la mezcla de concreto
En caso de muchos tubos de concreto una modificación de los agregados
o del tipo de cemento puede incrementar notablemente la durabilidad
para la aplicación correspondiente. Los métodos más
empleados son: Cuando existe el peligro de formación de ácido
sulfúrico biogénico, se seleccionan agregados dolomíticos
en combinación con un mayor recubrimiento de la armadura con
concreto. Este método estándar se da desde los años
sesenta que está acreditado en la mayoría de las tuberías
de aguas residuales, siempre que no rijan las condiciones extremadamente
agresivas arriba descritas. Este modo de procedimiento incrementa con
relación a los tubos estándar, la vida útil en
aproximadamente 6 a 8 veces.
Cuando las condiciones reinantes son demasiado agresivas para los métodos
estándar arriba indicados, se pueden proteger los tubos de concreto
con una capa de cemento de aluminato de calcio y agregados dolomíticos.
Este método se emplea desde los años sesenta y puede incrementar
la vida útil de tuberías de aguas residuales en comparación
con una tubería del mismo espesor de concreto con agregados dolomíticos
en 3 a 4 veces.
En entornos de agua marina los tubos de concreto pueden ser producidos
con aditivos de cemento como escoria de altos hornos o ceniza volante,
para impedir los problemas del ataque de sulfatos o la penetración
de cloruros. c
Referencia: Mark
G. Alexander, University of Cape Town, Sudáfrica A. M. Goyns,
PIPES CC, Sudáfrica;
PHI International, 2 1 2008.