Inspirado en la capacidad de adaptación y resistencia de la naturaleza, el reto es redefinir la estructura y expansión de las grandes urbes, desarrollar un modelo innovador de construcción vertical que unifique los revolucionarios conceptos ingenieriles y tecnológico-industriales capaces de superar la frontera de los 500 metros de altura, con los nuevos modelos bio-ecológicos del urbanismo y la arquitectura.
Tentativamente ubicada en Shanghái, contará con una cimentación flotante que crece conforme la torre gana altura, esto quiere decir que sus vigas se encuentran apoyadas en el terreno, no clavadas en él; tendrá una estructura de tipo membrana que es hueca con paredes muy delgadas de alta resistencia hechas de hormigón, una estructura exterior tipo fractal que permite la circulación del aire y reduce el efecto del empuje del viento, una altura aproximada de 1,230 metros de altura, 300 plantas en 12 niveles y una capacidad de 100,000 habitantes.